Soy realista.

Aquí y ahora no puedo vivir plenamente en el espíritu, porque aquí la realidad lo impide implícitamente.

Mi misión es mantener y reforzar mi conexión con el Origen, y reportar toda información para destruir al Enemigo.

Tengo que aprender a explotar el alma en mi beneficio, estratégicamente.

Aprovechando todo lo bueno que me pueda aportar y combatiendo lo malo. Porque esa es mi realidad aquí, y contra eso lo único que puedo hacer es poner fin a mi existencia, cosa que no voy a hacer mientras haya cerveza fría en mi mano.

¿Entiendes?